Residencias artísticas en SECOS impulsan nuevas miradas sobre la costa

Ciencia y arte se unen en SECOS a través de dos residencias de investigación artística contemporánea que exploran la relación entre el paisaje costero, las comunidades y el cambio ambiental.

En su compromiso por fomentar el diálogo entre las ciencias y las artes, el Instituto Milenio en Socio-Ecología Costera (SECOS) ha impulsado dos residencias de investigación artística contemporánea, desarrolladas de manera piloto durante 2024-2025. Estas residencias, a cargo del dúo de artistas Carla Bolgeri y Francisco Marín, junto con la artista textil Javiera Asenjo, consolidan un espacio de exploración y diálogo transdisciplinario.

Para la investigadora de SECOS, Fernanda Oyarzún, “estas residencias buscan ser un espacio que va más allá de la divulgación o de la ‘representación’ de la investigación científica. Esto no es arte al servicio de la ciencia, sino espacios de verdaderas colaboraciones transdisciplinarias, de diálogos abiertos entre la investigación científica, la investigación artística y los saberes tradicionales. Son instancias donde la exploración de los sistemas socioecológicos ocurre en los territorios, cuestionando y expandiendo procesos, y adoptando una visión amplia de lo que es y puede ser el conocimiento”.

Bolgeri & Marín: explorando el viento y la geomorfología costera

El dúo artístico Bolgeri & Marín, reconocido por su trabajo interdisciplinario en sonido, performance e instalación, ha centrado su residencia en SECOS en el estudio del manto eólico y los procesos geomorfológicos asociados al viento en la costa chilena.

“Estamos investigando el movimiento que genera la fuerza del viento en diversos materiales y estructuras efímeras. La posibilidad de colaborar y compartir experiencias con diversos científicos y científicas enriquece nuestra investigación dando lugar a nuevos paradigmas, posibilidades técnicas, y públicos. Interactuar con el viento es una manera de dialogar con la naturaleza y esto es una experiencia conmovedora, muy relevante, para preservar una conexión sensible con nuestro ambiente”. señalan Bolgeri & Marín.

Durante 2024, visitaron territorios clave como Coliumo y Tubul (Región del Biobío) y realizaron una residencia en la reconocida Casa Poli, estableciendo diálogos con la comunidad y con investigadores de la Universidad del Bío-Bío y SECOS, como Nicolás Sáez y Gonzalo Saldías. En noviembre, sostuvieron un encuentro con la investigadora adjunta de SECOS, Genevieve Tremblay, para explorar posibles cruces entre su investigación y la modelación de datos en realidad virtual.

Para 2025, Bolgeri & Marín han profundizado su investigación con visitas a la Estación Costera de Investigaciones Marinas (ECIM) en Las Cruces y la desembocadura del Río Maipo, sitios clave en la investigación de SECOS. Acompañados por la investigadora Fernanda Oyarzún y en diálogo con los investigadores Carolina Martínez y Sergio Navarrete, han experimentado con interfaces que visualicen, de manera artística, las dinámicas costeras y su impacto en las comunidades locales. Además, han comenzado a establecer una colaboración con Adam Summers (University of Washington) para explorar conexiones entre biomecánica y experimentación artística.

Como siguiente paso, Bolgeri & Marín realizarán un taller y performance en Coliumo y Tubul durante marzo-abril de 2025, abriendo un espacio de experimentación y diálogo entre artes, ciencias y conocimientos territoriales.

Javiera Asenjo: tejiendo conocimientos a través del arte textil

Por su parte, la artista Javiera Asenjo ha desarrollado una residencia enfocada en la investigación de las artes de pesca y su relación con las materialidades textiles, la memoria y la transmisión de conocimientos. Su punto de partida ha sido la investigación liderada por Fernando Venegas, Rodrigo Estévez y Stefan Gelcich, centrada en la recuperación del conocimiento histórico sobre técnicas de pesca a partir de registros judiciales de la época colonial.

“Ha sido muy interesante esta colaboración, porque me ha llevado a observar otros mundos textiles que no había abordado, y con ello conocer e imaginar diversas tecnologías textiles para la pesca, creadas/usadas por quienes han habitado y habitan las costas de chile.
También se me han abierto muchas preguntas sobre cómo se pesca hoy en día, y poder establecer diálogos con científicos es riquísimo debido a la complejidad de capas sociales y ecológicas que este tema implica”, señala Asenjo.

Durante el último año, Asenjo ha profundizado en el estudio de las técnicas empleadas en la creación de artes de pesca, analizando en detalle los materiales, procesos y saberes involucrados, desde metodologías precolombinas hasta prácticas contemporáneas. Su investigación ha incluido diálogos con expertos y el estudio de colecciones en museos clave, como el Museo Chileno de Arte Precolombino y el Museo de Historia Natural e Histórico de San Antonio (MUSA).

En su trabajo de campo, Asenjo ha recorrido comunidades pesqueras como Caleta Chungungo, donde ha dialogado con pescadores especializados en la reparación de redes y explorado la dimensión técnica y simbólica de este oficio. Junto a la investigadora Fernanda Oyarzún y la artista Sol Pacheco, ha generado intercambios que han nutrido su investigación artística.

Durante el verano de 2025, Asenjo amplió su residencia con una visita a la desembocadura del río Maipo, donde colaboró con Bolgeri & Marín en la exploración del territorio. En este contexto, se reencontró con el pescador Miguel Quiroz Trincao, con quien practicó técnicas de tejido de redes y exploró nuevas materialidades. Asimismo, visitó el Museo Regional de San Antonio y diversos humedales del río Maipo, reflexionando sobre las conexiones entre paisaje, biodiversidad, ecosistemas y prácticas pesqueras, así como sobre la reimaginación y visibilización del rol de las mujeres en las comunidades pesqueras.

Con miras a expandir su trabajo, Asenjo ha manifestado interés en explorar las materialidades de la acuicultura, proyectando una visita a Caleta El Manzano. Este nuevo enfoque podría vincular su investigación al SES de Acuicultura de SECOS, ampliando el impacto de su residencia más allá del SES de Pesca Artesanal.

Las residencias de investigación artística en SECOS han abierto un espacio de experimentación y colaboración que amplía las formas de comprender y representar los sistemas socio-ecológicos costeros. Estas iniciativas no solo enriquecen la investigación científica, sino que también generan nuevas narrativas y formas de conocimiento, promoviendo un diálogo genuino entre arte, ciencia y territorio.